La primera parte de este artículo finalizaba
con las siguientes preguntas:
¿Pero y si el objetivo de todo lo que estamos
viendo es otro? ¿Y si todo esto, aparte de no ir de democracia ni de justicia,
no va ni siquiera de soberanismo?
Personalmente, no me puedo creer que esos
políticos, a los que se les llena la boca de soberanismo e independentismo,
quieran deshacerse del “yugo opresor” de Madrid y, sin embargo, se desvivan por
seguir con el “yugo opresor” de Bruselas (no se cual de los dos será peor)
Resulta, cuanto menos chocante, que “Junts Pel
Sí”, la plataforma secesionista e independentista, apueste en su programa por
la permanencia de Cataluña en la dictadura tecnócrata de la UE y la zona Euro. ¡Manda
huevos! ¿Pero qué parte de eso que llamamos independencia no entienden? Qué
pasa: ¿es que el día que lo explicaron en clase no fueron al cole?
¿Y los de la CUP? Estos se autoproclaman
“anti-sistema”: no sé qué clase de “anti-sistema” se puede ser participando
activamente del sistema y sus instituciones (me parece que estos tampoco fueron
a clase el día que lo explicaron)
Lo triste de todo este asunto es que están
jugando con los sentimientos de las personas, ya que han ilusionado a más de
dos millones de catalanes que creen ingenuamente que una independencia de
Cataluña es posible. Lo siento por ellos.
Hay que ser muy ingenuo e idealista para
pensar que España va a prescindir de un territorio de 38.108 km2 que
le reporta el 20% de su PIB. Otra cosa es que, quien realmente manda, le
obligue a hacerlo.
¿Quieres saber para qué está sirviendo verdaderamente
este “Procés”? Pues, entre otras cosas que desconozco, para esconder debajo de
la alfombra lo siguiente:
-La deuda pública de este país es superior al
100% del PIB (impagable) y va a tener a varias generaciones endeudadas.
-En estos 40 años de “Democracia” se ha
expoliado nuestro patrimonio privatizando nuestras mejores empresas.
-España es un país con un paro galopante y
lejos de la mentira de disminuir está aumentando, según dice la propia EPA.
-Nuestros jóvenes simplemente no tienen
futuro, así que huelga decir que jamás van a cobrar una pensión.
-La deslocalización de empresas españolas ha
sido bestial, con nuestra empresa insignia, INDITEX, a la cabeza.
-La hucha de las pensiones ha sido fagotizada
por este gobierno.
-Nuestras empresas del IBEX 35 tienen más de
cien sociedades “offshore” en paraísos fiscales.
-El dinero del recate a los bancos, sacado de
la hucha de las pensiones, nunca lo vamos a recuperar (el Gobierno ya lo ha
dado por perdido).
-El tratado de libre comercio con Canadá
(CETA) ha sido aprobado en estos días, por la “puerta de atrás”, mientras
estábamos distraídos con el “Procés”.
-El turismo, nuestra mejor industria (en mi
opinión pan para hoy y hambre para
mañana), genera empleo temporal de nefasta calidad y paupérrimos salarios (ese
es el empleo del Gobierno).
-Los casos de corrupción (Gürtel, Rato, Lezo,
Palma Arena, del 3%, etc.) están pasando inadvertidos y son manipulados a
conveniencia.
-El Gobierno, mientras estamos entretenidos
con el llamado “conflicto catalán”, ha anunciado con total impunidad nuevos
recortes en educación, sanidad, protección social y otra nueva pérdida de poder
adquisitivo de las pensiones, impuestos desde Bruselas.
Y la pregunta es: ¿Cuánto puede aguantar este
país así?
La realidad es que aquí estamos todos
engañados: catalanes, madrileños, vascos, gallegos, andaluces, cántabros, etc.
Quienes verdaderamente deciden este tipo de cosas
-que, por supuesto, no son ni los Rajoys ni los Puigdemones de turno-, sabrán
por qué quieren desestabilizar España.
¿Será para llevar a cabo una reforma de la
constitución y hacer de España un Estado Federal? ¿Un primer paso para hacer de
Europa un Estado Federal e ir hacia un estado único? ¿Para desmembrar Europa?
No lo sé, no dispongo de información suficiente para dar una respuesta.
Pero lo que no me trago, es que de la noche a
la mañana el “populacho” haya decidido -él solito- salir a la calle para
reivindicar que quiere ser independiente. ¿Independiente de qué? Si
verdaderamente lo hubiese pensado él solito, se habría dado cuenta de que esa
falsa independencia no va a cambiar nada
su vida: va a tener que seguir trabajando para pagar impuestos y seguirá
estando sometido a un gobierno y sus leyes. Entonces, ¿de qué independencia
estamos hablando?
Los que saben de estas cosas, han calculado
que no son más de ocho mil personas las que controlan el mundo, y lo hacen
mediante el sistema financiero (o sea, el dinero) de la siguiente manera:
En la cúspide del escalafón del poder del
dinero está el Banco de Pagos Internacional (BPI), ubicado en Basilea, Suiza (¡ojo!
pertenece a unos ocho mil fondos de inversión privados). Seguidamente se
encuentra el Banco Mundial (BM) y el Fondo monetario Internacional (FMI): estos
reciben órdenes directas del BPI. En tercer lugar tenemos los bancos centrales;
es decir, el Banco Central Europeo (BCE), la Reserva Federal (FED), el Banco de
Inglaterra, etc. En cuarto lugar están el resto de bancos comerciales. Y, por
último, los gobiernos, que endeudándose sirven a los intereses de todos los
anteriores.
Una vez aclarado como se distribuye el
escalafón del poder mediante el dinero, veamos lo siguiente.
La UE ha anunciado que quiere poner en marcha
el llamado Fondo Monetario Europeo que, según Donald Tusk, Presidente del
Consejo de la UE, entrará en vigor en junio de 2018.
La creación de este organismo significará que
una institución “paneuropea”, como es el Banco de Pagos Internacional (que será
el encargado de llevarlo a cabo), tendrá el control sobre todos los Estados
miembros.
Estamos hablando de que este organismo fiscalizará
las políticas monetarias de cada país, con lo cual, lo controlará todo,
incluido los servicios de inteligencia, la policía y las fuerzas armadas. ¡Ah!
Y, por supuesto, todo se gestionará desde Bruselas. De esta manera conseguirán
hacer de la UE el primer “modelo avanzado” para la creación de un solo estado a
nivel mundial: “nuevo orden mundial”.
Es más que sospechoso que Luis de Guindos,
Soraya Sáez de Santamaría, Mª Dolores de Cospedal, José Manuel García Margallo,
Albert Ribera y Pedro Sánchez (asistentes todos ellos a reuniones del Club
Bildelberg), curiosamente estén demandando hacer de España un Estado Federal
como solución al “conflicto catalán”. Por lo tanto, no sería de extrañar que
utilicen estrategias como la del “Procés” para conseguirlo.
Ya lo he dicho en multitud de ocasiones: no
podemos ni debemos seguir soportando y aceptando este grado de manipulación.
Pero no se trata de tirarnos a la calle a
protestar, eso es lo que quiere y tiene previsto el sistema.
La verdad es que no es tan difícil.
Si consiguiéramos que el “populacho” (eso es
lo que somos para la élite) tomara conciencia y fuera capad de hacer tres
simples gestos, como dejar de ver televisión, no votar y sacar mensualmente el
dinero de la nómina o pensión de los bancos, no te imaginas el daño que
supondría para el sistema. Puede que entonces nos tomaran en serio. Aunque me
temo que lo de “no es tan difícil” es una ilusión mía.
Es impactante y no menos preocupante pero lamentablemente solo apta su lectura para mentes privilegiadas y medianamente cultivadas que lejos de ser aborregadas y adoctrinadas por canales de TV y medios escritos, nos dedicamos a ver un poco mas allá de la basura que nos rodea y que lamentablemente muy poco podemos hacer por cambiar el rumbo del rebaño.
ResponderEliminarMuchas gracias
Ralph Queen