jueves, 29 de julio de 2021

LA IMPORTANCIA DEL TONTO ÚTIL

¡Señores! Definitivamente el “Homo Sapiens” ha desaparecido dando lugar al “Homo Imbécilis”. El “Homo Sapiens” ha perdido la capacidad de pensar y decidir por sí mismo, por lo tanto, ahora todo se reduce a imitar comportamientos y a repetir palabras vacías de contenido que, sin embargo, han sido creadas para manipular sociedades enteras. Ese es el “Homo Imbécilis” de hoy en día, también llamado tonto útil, que sigue ciegamente el relato que le dictan los medios de comunicación.

El tonto útil es el esclavo perfecto. Es dócil, sumiso y obediente. Nunca se cuestiona nada y siempre cumple las normas, aunque vayan en contra de sus propios intereses.

Se levanta temprano para coger el autobús, el metro o el coche que le lleve a la fábrica, la oficina o el comercio, donde pasará el resto del día trabajando para pagar impuestos. Y esto será así durante el resto de su vida.

Entre tanto, su cuerpo y su mente se van deteriorando a pasos agigantados.

Pasado el tiempo, y cuando el tonto útil ya ha sido exprimido como un limón, se le dice que llegó la hora de jubilarse: le regalan un reloj –en el mejor de los casos- y ahí se queda con su miserable pensión, hasta que un buen día un cáncer o un infarto acaban con su vida, si es que a eso se le puede llamar vida.

Pues bien. A esos tontos útiles es a los que va dirigida toda la propaganda. Esos tontos útiles son los que con su voto legitiman el Sistema. Son los que se creen a pies juntillas la falsa pandemia y a los que se les pide que se vacunen para “salvar a toda la humanidad”. “Vacuna”, por cierto, experimental y de la que nadie se hace responsable, pero al tonto útil le da igual. Así que el Sistema contento, porque ya están prácticamente todos vacunados, y el tonto útil encantado con su Gobierno, que le ha “salvado la vida” y además “mira por él: le sube los impuestos, la electricidad, el agua, el transporte y la cesta de la compra. Pero no importa, porque es por su bien. ¡Ah! y no te ofendas si te sientes aludido, yo también.

Está claro que si en el mundo hay unos pocos tíos listos es porque somos demasiados tontos útiles. 

¿De verdad el tonto útil cree que el progreso y la tecnología son para él? ¿Es que no ve que sigue en la misma fábrica, oficina o comercio? ¿No se da cuenta de que con su pasividad y sumisión nos está matando a todos?

Tras un año y medio de falsa pandemia, ya disponemos de suficientes datos para saber que todo este montaje tiene dos objetivos: la vacunación en masa de toda la población mundial y llevar adelante el Gran Reinicio.

No seas ingenuo. Ni la élite ni nuestros gobiernos nos van a curar nunca de nada. ¿No ves que si no enfermamos la industria farmacéutica desaparecería? Y lo más convincente: ¿de verdad crees que los gigantes  BlackRock, Vanguard Group y State Street lo permitirían?

Después de más de un año y medio viendo lo que está sucediendo, consultando información en los medios de comunicación oficialistas y alternativos, en las diferentes páginas web académicas de investigadores de todo el mundo, de leer los informes de la OMS, los de los CDC y de diferentes organizaciones sanitarias gubernamentales y no gubernamentales, he llegado a las siguientes conclusiones.

1º. Que los medios de comunicación de masas han hipnotizado con el miedo a la inmensa mayoría de la población que, en general, está en un estado de shock del que le va a ser muy difícil salir.

2º. Que quienes están detrás de esto conocen perfectamente el estado mental de la población (a través de los “big data”) y sabían que fibra tocar.

3º. Que encerrar a la gente en casa, obligarle a llevar mascarilla, evitar los contactos y destruir la economía no es precisamente para salvarnos la vida, sino un gran experimento de ingeniaría social y algo más.

4º. Que la falsa pandemia se creó para inocular a toda la población mundial una “vacuna”, y que dicha vacuna, de ARNm, es un experimento muy peligroso cuyas consecuencias a medio-largo plazo se desconocen (al menos nosotros).

5º. Que esta “vacuna” ya era una realidad antes del Covid-19, como lo demuestra el acuerdo de confidencialidad -que puedes ver aquí- entre Moderna y el "Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas" (NIAID), donde acordaron transferir las "vacunas” de ARNm contra el coronavirus a la "Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill", el 12 de diciembre de 2019.

6º. Que algunos de los que impulsan estas vacunas (la OMS, la ONU, la Fundación Bill y Melida Gates, el Foro Económico Mundial, la Fundación Rockefeller, etc.) tienen un largo historial de querer reducir drásticamente la población mundial, y que la "terapia génica" de tipo ARNm, llamada “vacuna”, es la clave de su plan genocida.

7º. Que ya no me cabe la menor duda de que existe un plan eugenésico a nivel global, bajo la evidencia de que, el 10 de junio de 2021, el Ayuntamiento de Westminster publicara, a través de este enlace, una oferta pública para buscar empresas que ofrezcan, ¡ojo al dato!, un “servicio de almacenamiento temporal de cadáveres” para los próximos cuatro años.

8º. Que la eutanasia, recién legalizada en España, y la pretensión, por parte de la OMS, de declarar la vejez como enfermedad.l, a partir de 2022, están estrechamente relacionadas y tienen como objetivo deshacerse de la población mayor.

9º. Que el levantamiento (temporal, por supuesto) que el Gobierno nos ha concedido de algunas de esas estúpidas medidas restrictivas, que han vuelto paranoica a la gente, volverán a ser aplicadas no tardando mucho con la excusa de nuevas olas o nuevas cepas más peligrosas, como ya estamos viendo.

10º. Que, al final, después de mucho sufrimiento inútil y muerte, la verdad saldrá a la luz y espero estar todavía aquí para asistir al procesamiento de todos los responsables.

Pero mientras la gente se encuentra en esta burbuja colectiva de miedo e ignorancia, el complot de las élites para despoblar el planeta y remodelar el mundo a su antojo sigue adelante.

Es frustrante ver cómo la gente se siente segura detrás de una puta mascarilla en este nuevo estado de obediencia y sumisión total. Pero lo más lamentable, es que se permiten el lujo de indignarse contra quienes luchamos por sacarles de zombilandia, para que puedan volver a ser personas con dignidad.

Por mi parte -dado que la destrucción masiva de la mente de las personas ha dado lugar a una sociedad ignorante, infantiloide, apática, dependiente e irresponsable-, seguiré escribiendo y difundiendo información objetiva para dar a otros la oportunidad de crearse sus propias opiniones, proteger su libertad y acabar, si es que es factible, con esta farsa lo antes posible. De lo contrario, nos veremos abocados a seguir viendo cosas tan surrealistas como que te vacune un banco, unos grandes almacenes, una constructora (Santander, El Corte Inglés y Acciona) o que las discotecas hagan test de antígenos a los jóvenes. Por cierto, se habla, también, de la posibilidad de vacunarlos en las mismas discotecas.

Y ahora pregúntate: ¿De verdad crees que estamos haciendo lo correcto? ¿Qué tenemos que seguir cumpliendo esas estúpidas normas? ¿Qué no nos hemos vuelto imbéciles?

Lo que nos están haciendo no es ninguna broma. Tenemos que dejar de ser tontos útiles, empezando por respetarnos a nosotros mismos para recuperar la dignidad. No tengáis miedo de decir a los demás que están siendo víctimas de una gran mentira. Es la única manera de parar esto. Y lo tenemos que hacer nosotros. De lo contrario, ya no habrá futuro para la humanidad tal y como la conocíamos.

Los adeptos de la “nueva normalidad” -es decir, aquellos abducidos por el miedo que todavía siguen llevando la puta mascarilla en exteriores sin necesidad de hacerlo- no se comportan así porque hayan nacido tontos útiles. Se comportan así porque han sido víctimas de la mayor y más eficaz campaña de propaganda oficial de la historia de la humanidad, creada por la ingeniería social y divulgada por los medios de comunicación de masas.

Para terminar, te dejo el enlace de un vídeo explicativo de la pandemia.7 (subtitulado, de 15 minutos), donde se dan las claves para entender cómo es posible orquestar una pandemia global con el fin de transformar la sociedad mediante ingeniería social. 


jueves, 15 de julio de 2021

PAREMOS LA VACUNACIÓN DE LOS NIÑOS

Vamos a recapitular los datos actualizados de la falsa pandemia para ver si, de una vez por todas, la gente despierta y deja ya de hacer el imbécil.

A 10 de julio de de 2021, y después de un año y medio de despropósitos, los datos oficiales (no necesariamente reales) son los siguientes:

Según la página web oficial de Worldometer, la población mundial a esta fecha era de 7.878.450.000 habitantes.

Personas contagiadas en el mundo por el supuesto Sars-Cov-2 que produce la enfermedad del Covid-19: 186.854.286 (el 2,3% de la población mundial).

Personas que se han recuperado de la enfermedad: 170.906.875 (el 91,4% de los contagiados).

Personas que han fallecido, supuestamente, de Covid-19: 4.035.450 (o sea, han muerto el 2,1% de los contagiados, que supone el 0,05% del la población mundial).

Casos que siguen activos: 11.911.961 (es decir, que el 6,3% de los contagiados aún no se han recuperado).

¿Todavía no lo ves? Pues quítate la venda de los ojos. ¿No ves que con la excusa de esta enfermedad, ¡”tan mortífera”!, han arruinado la economía, están “vacunando” a toda la población mundial y ahora van a por los niños?

Veamos la incidencia del Covid-19 en los niños españoles.

En España han fallecido 22 niños y jóvenes de entre 0 y 19 años (¡ojo!, el 90% con comorbilidades). Ha habido 56.982 casos diagnosticados, sobre un total de 9 millones de niños y jóvenes menores de 19 años. Por lo tanto, la mortalidad en esta franja de edad ha sido del 0,00024%.

Bueno, pues con estos datos pretenden poner una vacuna a todos los niños y niñas de nuestro país, cuando la posibilidad de morir por la vacuna es muy superior a la de morir por Covid-19, ya que, según reporta la Agencia Europea del Medicamento, el porcentaje de muertes ocasionadas por las vacunas Covid-19, hasta el momento, es del 0,048%. Esto quiere decir que los niños vacunados tendrán 208 veces más posibilidades de morir por la vacuna que de morir por Covid-19.

¿Cómo se te queda el cuerpo? ¡Ah! Y aquí no hay ni ideología ni paranoia ni negacionismo ni otras gaitas. Aquí solo hay matemáticas.

Después de ver estos datos la pregunta inevitable es: ¿por qué ese empeño en vacunar a los niños? Y otra pregunta aún más importante y difícil de contestar: ¿se sabe realmente qué contienen las vacunas?

A este respecto, por las redes sociales están circulando una serie de vídeos, traducidos a diferentes idiomas, de unos investigadores españoles que han estudiando el fenómeno del magnetismo en personas vacunadas y su relación con el 5G.  Son unos impactantes vídeos que no creo que lleguen a ser difundidos por las televisiones, puesto que si son una elucubración se quedarán en eso y si estuvieran en lo cierto ya se encargarán los “cazadores de bulos” de desacreditarlos, desmentirlos y difamarlos.  

Los investigadores son el Dr. José Luis Sevillano, que ejerce la medicina en el sur de Francia, y Ricardo Delgado Martín, especializado en Bioestadística y fundador de un portal en Internet llamado LA QUINTA COLUMNA.

Pues bien. Después de un año y medio de investigación han llegado a la siguiente conclusión: el Covid-19 está producido por el ÓXIDO DE GRAFENO y la tecnología 5G. 

Adjunto un vídeo de 13 minutos para que lo analices y saques tus propias conclusiones (el óxido-de-grafeno en las vacunas Covid-19:6).

Por cierto, no te pierdas, a partir del minuto 11:11, al Presidente de Chile, Sebastián Piñeira, haciendo la presentación oficial del 5G en Chile, diciendo textualmente: “El 5G tiene la posibilidad de que las máquinas puedan leer nuestro pensamiento e incluso puedan insertar pensamientos y sentimientos, nos va a cambiar la vida y va a ser el verdadero sistema nervioso de nuestra sociedad”. Y luego, en el minuto 12:57, a nuestro Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ironizando con Santiago Abascal y haciendo un recochineo sobre: “un virus que nos van a meter por la sangre y que con el 5G nos van a controlar”. Y termina diciendo: “Señor Abascaaal, ¡por favooor….!” Pues bien. Cuando nuestro presidente asegura o niega algo, siempre resulta ser todo lo contrario. Acuérdate de cuando Pablo Iglesias le quitaba el sueño, solo por la mera idea de que pudiera estar dentro de las instituciones, y luego le nombró Vicepresidente del Gobierno.

También dejo el enlace de la página web, la quintacolumna.net/, donde puedes encontrar bibliografía referente sobre las utilidades del grafeno y, ¡ojo al dato!, 2 patentes de vacunas que contienen óxido de grafeno.

Por último, aquí está el enlace.pdf  del Informe Provisional (I), de la Universidad de Almería, sobre el “Análisis para la Detección de Oxido de Grafeno en Suspensión Acuosa (Comirnatytm (RD1)” de un vial de la vacuna de ARNm para el Covid-19.

Atención a lo que pone en la página 7: Espectro de Absorción UV de la Fase Acuosa de la Muestra RD1 (Equipo Nano–Drop). Concretamente, dice que la muestra solo contiene 6 ng/µl  de material ARN y, sin embargo, contiene 747 ng/µl de otra sustancia o sustancias no determinadas que no descarta que pudiera ser grafeno, pues al comparar los resultados al microscopio electrónico de la muestra con los que existen en la literatura sobre el grafeno son idénticos, tal y como se puede ver en la siguiente diapositiva sacada del informe.


Y ahora me dirijo a esos padres con hijos menores de edad. ¿De verdad vais a permitir que vuestros hijos sean tratados como cobayas?

Vosotros sois los que tenéis más fuerza para detener esta locura, de lo contrario, vuestra cobardía puede traer consecuencias imprevisibles para vuestros hijos (luego no vale lamentarlo).

¿Os acordáis de cuando lo importante era vacunar a los ancianos porque se consideraba que tenían más factor de riesgo? Pues ahora les toca a los jóvenes.

¿Es que no os dais cuenta de que todo esto de que ahora son los jóvenes los más contagiados no es más que un montaje para vacunar a vuestros hijos antes de que empiece el curso escolar?

Si es que es blanco y en botella.

Acaba de salir en televisión nuestro “gran experto en pandemias” (el tonto Simón, alias el “asusta viejas”) diciendo que están subiendo alarmantemente los contagios. Dice que la IA es ya de 469 casos por cada 100.000 habitantes y ha explicado que el aumento de casos tiene que ver con los menores de 40 años que aún no han sido vacunados. Y ahora viene lo mejor. Como no podía ser de otra manera, ha hecho hincapié en que la IA en los menores de 30 años es de 1.500 casos por cada 100.000 habitantes. ¡Toma ya! ¿Todavía lo dudas? Pues mira a tu alrededor y verás que siguen sin aparecer los enfermos y en los hospitales solo hay un 3,6% de camas ocupadas, supuestamente, por Covid.

Esto traducido al “román paladino” quiere decir que la gente joven no está acudiendo en masa al pinchazo, tal y como sí lo hicieron los mayores. Por lo tanto, hay que volver a alarmar a toda la sociedad para que los ya inoculados presionen a los jóvenes, y de paso a los padres de los menores para que se vean en la “obligación” de vacunar a sus hijos. Por desgracia, me temo que la mayoría de los padres se sentirán coaccionados por la presión social y aceptarán que sus hijos sean inyectados.

Pero hay recursos para evitarlo.

Por si no lo sabes, las llamadas vacunas Covid fueron registradas por la Agencia Española del Medicamento (AEMPS) como “fármaco sujeto a prescripción médica”; es decir, que es necesaria la expedición de la correspondiente receta por parte del facultativo que autoriza y se hace responsable de la inoculación del medicamento. Pues pide a tu médico que te extienda la receta para vacunar a tu hijo. Probablemente no encontrarás ninguno que lo haga.

Y otra. En cumplimiento con el artículo 8.2 de la ley 41/2002, que regula la autonomía del paciente, debes exigir el necesario consentimiento informado del paciente por escrito. Cosa que tampoco lo harán, pues estarían reconociendo que se trata de un experimento.

¡Despierta! Que están jugando con la vida de tus hijos. 

P.D. puede que alguno de los enlaces del artículo con el tiempo no estén disponibles puesto que habrán sido censurados.

miércoles, 7 de julio de 2021

LAS LESIONES Y MUERTES PROVOCADAS POR LAS VACUNAS SE ESCONDEN DEBAJO DE LA ALFOMBRA

Sí, ya sé que para el Gobierno y los medios de comunicación todo es de color de rosa respecto a las vacunas.

Pero la realidad es bien distinta. Cada día que pasa se incrementan los efectos adversos y las muertes ocasionadas por las vacunas, aunque la mayaría de las veces no son reconocidas como tales y son simplemente tomadas como anecdóticas, en el mejor de los casos, o meras coincidencias.

Veamos los datos de algunas de las instituciones que se dedican a recopilar esta información.

La Eudra Vigilance European (la base de datos de reacciones adversas a medicamentos de la Unión Europea), confirma, a 19 de junio de 2021, que han muerto 15.472 personas y  1,5 millones han tenido reacciones adversas (50% graves) provocadas por la vacuna Covid-19. 

Según el Gobierno del Reino Unido, del 9 de diciembre de 2020 a 23 de junio de 2021, se han producido 1.007.253 reacciones adversas y han fallecido 1.403 personas a consecuencia de la vacuna Covid-19.


En EEUU el CDC informa de 6.113 muertes después de la inyección de Covid-19, 576 abortos y 387.087 casos adversos.

En Canadá, hasta el 18 de junio de 2021, se notificaron un total de 119 muertes después de la administración de la vacuna, según un Informe de datos adversos serios.

En Australia, el número de muertos por la vacuna asciende a 355, a 27 de junio de 2021, según un Informe de seguridad de la vacuna del 1-07-2021.

En total, todos estos informes reportan la friolera de 23.462 muertes y nadie dice nada al respecto. Y eso que, según revelan las mismas instituciones que publican los datos, solo se reportan entre el 1 y 10% de los casos reales.

Por otro lado, la tasa de muerte informada por las vacunas de Covid-19 supera con creces la tasa de muerte informada de más de 70 vacunas combinadas durante los últimos 30 años, tal y como se puede ver en el siguiente gráfico. Tampoco nadie dice nada al respecto.

La mayoría de los vacunados tienen la falsa sensación de inmunidad y creen con toda seguridad de que están protegidos. Pero, en realidad, y según los propios expertos que aconsejaron la vacuna, son mucho más vulnerables.

Llamar "coincidencia" a más de 23.000 muertes simplemente no es creíble. Y descartar los riesgos de discapacidad permanente y otras lesiones graves para catalogarlas de “efectos colaterales” que valen la pena arriesgar, es una crueldad. Así que, ¿cómo se puede entender que porque un número determinado de gente dé positivo en un test, siendo mayoritariamente asintomáticos, se pare el mundo y, sin embargo, las muertes y los casos adversos de las vacunas no importen?

En general, está claro que las muertes y lesiones causadas por estas inyecciones se esconden debajo de la alfombra, y no podemos permitir que eso continúe.

Y ahora mira la siguiente tabla. Son los datos a 1 de julio de 2021 publicados por el Ministerio de Sanidad en España.

¿Dónde están los enfermos? ¿Dónde está la pandemia si solo están ocupadas por Covid el 1,99% de las camas de hospital y el 6,39% de UCI? ¿Y con estos datos quieren vacunar a todo el país, incluido niños?

Las vacunas deberían pararse inmediatamente, de lo contrario, conseguirán el objetivo para el que fueron creadas: reducir drásticamente la población mundial.

Y para muestra un botón. Según un estudio reciente, publicado en el New England Journal of Medicine, cuando las mujeres embarazadas reciben la vacuna contra el Covid durante su primer o segundo trimestre sufren una tasa de aborto espontáneo del 82%.

Pero lo más disparatado de todo, es que un estudio publicado en la prestigiosa revista científica “The Lancet” (por cierto, estudio revisado por pares)  asegura que la eficacia de las vacunas contra el Covid-19 son de un 0,84% para Pfizer, de un 1,2% para de Moderna, otro 1,2% la de Jannsen y un 1,3% para Astra Zeneca. Por lo tanto, eso de que las vacunas son eficientes en un 95% es una falacia. Todas engañaron al informar sobre la reducción del riesgo relativo (RRR) en lugar de la reducción del riesgo absoluto (ARR). Entonces, ¿no crees que deberías preguntarte para qué sirven realmente las vacunas?



jueves, 1 de julio de 2021

LOS AMOS DEL MUNDO, QUE YA CONTROLAN “EL JUEGO DEL MONOPOLY”, AHORA EXPERIMENTAN CON NOSOTROS

Si eres un poquito despierto te habrás dado cuenta de que hay algo que no funciona ahí fuera.

Desde hace un año y medio millones de personas se están empobreciendo a pasos agigantados. Por si aún no te has percatado, estamos inmersos en la “madre de todas las crisis”; eso sí, provocada, obviamente. Si todavía no te ha afectado no es porque no exista, sino porque aún no te ha llegado, pero no te quepa la menor duda de que tarde o temprano te afectará.

Vivimos en un mundo distópico donde nada es lo que parece. A todos nos han hecho creer que vivimos en una sociedad con un mercado libre de acuerdo a las normas de la competencia, pero nada más lejos de la realidad.

Un manojo de grandes grupos de inversión dominan todos los aspectos de nuestras vidas. Puede parecer exagerado, pero no lo es. Desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, todos los servicios que utilizamos y las cosas que consumimos dependen en gran medida de esos grandes grupos.

Estoy hablando, evidentemente, de los grandes fondos de inversión que determinan el curso del dinero. Estos mastodónticos grupos son los verdaderos protagonistas de todo lo que sucede en el planeta.

Si nos fijamos en cualquier multinacional como, por ejemplo, Coca-Cola, veremos que todas aquellas otras grandes compañías del sector, que en teoría compiten entre sí, proceden de unas pocas fábricas que monopolizan el sector.

La industria de la alimentación está llena de marcas que se agrupan en otras marcas más grandes, que a su vez se vuelven a agrupar en otras aún mayores. Estas últimas son las que cotizan en bolsa. Y aquí es donde entran en juego los grandes inversores, ya que, como no podría ser de otra manera, son los que se sientan en sus consejos de administración.

En Internet tenemos un montón de páginas web sobre finanzas donde podemos consultar y ver información detallada de quiénes son esos inversores. Da igual la gran corporación que consultemos, pues veremos que los mayores accionistas son siempre los mismos: BlackRock, Vanguard Group, State Street, Bank of America, JP Morgan Chase, Morgan Stanley, Berkshire Hathaway,….

Estos nombres no solo están presentes en la industria alimentaria, sino que se repiten en todas partes: en las grandes empresas tecnológicas, en las grandes cadenas de ocio e información, en la industria energética, en la aeronáutica, en la textil, en la automovilística, armamentística, en la banca y, por supuesto, en la industria farmacéutica.

Todos estos grupos de inversión juntos forman una inmensa red, a modo de pirámide escalonada, donde los inversores más pequeños están en manos de los mayores y estos a su vez están en manos de otros superiores. Y en la cúspide de la pirámide aparecen los tres nombres más importantes: BlackRock, Vanguard Group y State Street, llamados comúnmente “The Big Three”.

El poder de estas tres sociedades supera con creces todo lo que podamos imaginar. No solo poseen una gran parte de las acciones de las grandes corporaciones, sino que poseen también las acciones de los inversores de dichas corporaciones. Lo que significa que son los que controlan el “juego del Monopoly” en que han convertido el planeta.

Evidentemente, detrás de esos grandes fondos de inversión hay personas. Esas personas pertenecen a las mismas familias que llevan ejerciendo el poder en la sombra durante siglos. Pero con el “despertar” de cierta parte, no tan ignorante, de la población, todas esas familias poderosas se han visto en la necesidad de esconderse detrás de fundaciones filantrópicas, que no son otra cosa que el nexo de unión entre las empresas, los gobiernos y los medios de comunicación. Y así es cómo hacen sus chanchullos y esconden los conflictos de intereses.

Las fundaciones sin ánimo de lucro son independientes de las naciones. No están obligadas a publicar los nombres de sus donantes y pueden invertir su dinero de la forma que quieran y donde quieran. ¡Ah! Y, por supuesto, no pagan impuestos siempre que “inviertan” en nuevos proyectos.

Las cuatro fundaciones más importantes que conectan toda la industria mundial son: la Fundación Bill y Melinda Gates, la Fundación Open Society de Soros y la Fundación Rockefeller y la Fundación Clinton.

Veamos el inmenso poder de estas cuatro fundaciones.

Según la web del Foro Económico Mundial, la Fundación Bill y Melinda Gates es la que aporta mayor financiación a la OMS, convirtiéndose en la fundación más influyente en lo que se refiere a nuestra salud. Esta fundación trabaja codo con codo con los laboratorios de Pficer, Astra Zeneca, J&J, etc., de rabiosa actualidad en este momento por las razones que todos conocemos.

Bill Gates fue el fundador de Microsoft, compañía con la que se hizo inmensamente rico. ¿Y sabes quiénes son los mayores accionistas de Microsoft? Pues sí, ¡acertaste!: Vanguard Group, BlackRock y Berkshire Hathaway.

Y lo mismo sucede con las otras tres fundaciones. Todos ellos forman parte del mismo entramado y son los responsables de la situación actual.

¿Y qué pasa con los medios de comunicación? Pues más de lo mismo.

El 90% de los medios de comunicación están en manos de un conglomerado de grupos mediáticos. Amazon, Netflix, Warner, Disney, Broadcast, Fox, Warner Bros, Viacom CBS, controlan el “ocio audiovisual” (documentales y películas) y los medios que difunden la información. Pues bien. Si miramos en el accionariado de estas empresas veremos que los mayores accionistas siguen siendo los mismos de siempre: Vanguard Group, BlackRock, State Street,…

Para corroborar que esto es real, solo tienes que mirar el informe de Oxfan Bloomberg, en el que dice que el 1% de la población mundial tiene más riqueza que el 99% restante. Y lo que es aún más grave: que el 85% de las ganancias, en 2017, fueron a parar a ese 1%.

Bueno, pues aquí lo tenemos. Si estos grupos controlan toda la industria, los medios de comunicación y los gobiernos, dado que los tienen en sus manos bajo el yugo de la deuda, en el mundo nadie mueve un solo dedo sin su consentimiento. Por lo tanto, todo lo que está sucediendo, incluido el experimento génico al que están sometiendo a toda la población mundial, no es cosa del azar. ¡Capisci!