martes, 21 de junio de 2022

REFORMA DE LA LEY DE SEGURIDAD NACIONAL

¿Saben los ciudadanos españoles que estamos a punto de que se apruebe la reforma de la Ley de Seguridad Nacional?

El Gobierno, que ha puesto todo su empeño en arruinar el país, no tardando mucho acabará declarando a la nación en quiebra. Para poder paliar la situación (esa es la excusa que van a poner), no le va a quedar más remedio que acceder a los ahorros y patrimonio de los ciudadanos. Por eso necesita aprobar la reforma de la Ley de Seguridad Nacional (Ley 36/2015), cuyo proyecto ya se votó en el Congreso de los Diputados con el apoyo del PSOE, PP y VOX.

España actualmente cuenta con 47.326.687 habitantes. Según datos del Fondo Monetario Internacional, tiene un PIB anual de 1.205.063 millones de euros, una renta per cápita de 24.680 €, una deuda total de 1.427.235 millones de euros, un porcentaje de deuda sobre su PIB del 118,40% y un déficit del 6,87%.

Por otro lado, el gasto público español es extremadamente elevado. El Gobierno Central con sus 22 Ministerios, los 17 “mini reinos de taifas” de las Comunidades Autónomas, una plantilla de funcionarios públicos de las más altas del mundo y más de nueve millones de pensionistas hacen que los Presupuestos Generales del Estado siempre se queden cortos. Si a esto le sumamos la inflación galopante que ha traído la incesante flexibilización cuantitativa y el parón que sufrió el país por la falsa pandemia, el resultado es una deuda pública que no deja de crecer. Para hacernos una idea de lo que estamos hablando, desde 1995 la deuda pública española ha aumentado un 350%.

¿Esto qué quiere decir? Pues que esta situación no la ha traído ni el Covid ni la guerra de Ucrania, esto se lleva gestando desde hace décadas.

Los ciudadanos de este país, como los de cualquier otro, no sabemos realmente lo que se cuece entre bambalinas en la esfera política y económica: lo que se dice en los medios es una cosa y la realidad es otra.

Si hiciéramos una encuesta y le preguntásemos a la gente si sabe que está a punto de aprobarse la reforma de la Ley de Seguridad Nacional y lo que eso significa, probablemente nos encontraríamos con una mayoría abrumadora que ni siquiera ha oído hablar de ello. Y los que sí han oído hablar de ello creen, tal y como les han contado, que los cambios son simplemente para incrementar la seguridad ante una nueva “crisis sanitaria”.

Sin embargo, en el artículo 28 del proyecto se deja bien claro que, ante una situación de “crisis” de cualquier índole, bien sea sanitaria, económica, cibernética, marítima, aeroespacial o medioambiental, la expropiación y confiscación de la propiedad privada puede y debe aplicarse por el bienestar de la nación.

Esto pone de manifiesto que la reforma de la Ley de Seguridad ciudadana da plenos poderes al Gobierno para que, si España entra en quiebra, pueda ordenar un "corralito", de la noche a la mañana, como ya se ha hecho en Grecia, Chipre, Argentina o recientemente Sri Lanka. Y lo que es más importante. Esta Ley otorgará al Estado poder para acceder a nuestras cuentas bancarias y expropiar nuestros ahorros “temporalmente”. En estas circunstancias, los ciudadanos solo podremos retirar pequeñas cantidades de dinero y, según anunció recientemente el Gobierno, se podrá embargar a todos aquellos que superen el salario mínimo y no, como hasta ahora, los 100.000 €.

A ver si nos enteramos de una puñetera vez de que España es un país con la suficiente riqueza y capacidad emprendedora de sus ciudadanos para no tener que ir nunca a la quiebra. Si vamos a la quiebra es porque así lo han querido nuestros dirigentes, que no hacen otra cosa que poner palos en las ruedas de la economía para que esta colapse; no te quepa la menor duda.

Entonces, la pregunta inevitable es: ¿quién o quiénes están interesados en que España se hunda? Pues los mismos que quieren destruir nuestras sociedades, nuestros trabajos, nuestras naciones y, en definitiva, acabar con el ser humano tal y como lo conocemos.

No es casualidad que el Foro Económico Mundial (FEM) esté tan firmemente posicionado detrás del Cambio Climático, de la Agenda 2030 y del Gran Reinicio.

Con la excusa de "salvar el planeta”, el FEM (testaferro de le élite) tiene previsto la destrucción de los pueblos en beneficio de esa “casta” de maníacos que conforma el 0,1% de la población mundial. Lo que pretende es imponer en todo el planeta un mundo globalizado, gestionado por una coalición de corporaciones capitaneadas por la OMS y la ONU.

El FEM quiere infiltrarse (de hecho ya lo está haciendo) en los gobiernos utilizando los alumnos que salen de su escuela de líderes globales (Macron en Francia, Trudeau en Canadá, Ardren en Nueva Zelanda…). También quiere introducirse en nuestros cuerpos y en nuestras mentes usando todo tipo de tecnología. En definitiva, quiere controlar lo que hacemos, lo que decimos y hasta lo que pensamos. Y no lo digo yo, lo han dicho ellos mismos en la reunión celebrada este año en Davos.

Cualquiera que haya seguido las conferencias del FEM, sabrá que allí se ha hablado, por ejemplo, del seguimiento individualizado de la huella de carbono, de limitar la libertad de expresión o de la exigencia de “pasaportes” para navegar por la red, entre otras cosas.

¿Tú quieres un mundo así? Pues sigue callado y obedeciendo todas las nuevas ocurrencias de estos seres patológicos y lo tendrás.

Bajo mi punto de vista, no es de personas inteligentes dejar las cosas que atañen directamente a nuestras vidas -como es el caso de la Seguridad Nacional- en manos de unos payasos, llamados políticos, que trabajan a las órdenes del poder global del dinero que, por cierto, les paga muy bien.

Mi pregunta final es: ¿Dejaremos que se apruebe la reforma de la Ley de Seguridad Nacional? Si España ha sido el país número uno del mundo en acatar con un fervor enfermizo la histeria covidiana, me temo que sí. 

1 comentario:

  1. El largo 40% de abstención en Andalucia ( más los blancos y nulos desafectos) no deja de ser un rayo de esperanza.
    Venganza!!! Gritan los cielos...y los infiernos...igual!!!!

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