Después de casi 2
años de interminable ritual covidiano ya hay mucha gente despierta que se ha
dado cuenta de que la supuesta “crisis sanitaria”, ocasionada por el Covid-19,
ha sido diseñada para provocar cambios drásticos en la sociedad.
La desinformación
y propaganda emitida durante décadas por la poderosa televisión, unida a la
aparición de Internet y los teléfonos móviles, han acelerado el proceso de
infantilización de la sociedad, de ahí la indiferencia con la que nos dejamos
anular y manipular por el Nuevo Orden Mundial.
Estamos siendo
sometidos a una operación meticulosamente planificada para introducir la agenda
2030 de la ONU y el “Gran Reinicio” económico y tecnológico del Foro Económico Mundial.
No hay más.
Covid-19 es,
además, una operación psicológica -dentro del paquete de ocurrencias ideológicas
del siglo XXI- para introducir ideas y conceptos nuevos que condicionarán
nuestra vida de aquí en adelante.
Después de dos interminables
años, las evidencias muestran que ninguna medida adoptada para contrarrestar la
falsa pandemia estaba justificada: ni mascarillas ni confinamientos ni
distanciamiento social ni “vacunas”. Todas las medidas han sido desproporcionadas
y un auténtico fracaso a la hora de terminar con la enfermedad. Sin embargo, han
sido muy eficientes para llevar a cabo su plan.
Lo primero que
tenemos que tener en cuenta es que en el mundo actual nada, absolutamente nada,
se consigue sin dinero. Dicho esto, hemos de reconocer que semejante fraude
pandémico mundial no se hubiera podido llevar a cabo sin financiación. Esto
quiere decir que ningún gobierno podría implementar las medidas contra la falsa
pandemia si no estuviera respaldado financieramente. Y aquí es donde entran en
escena el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional: los dos grandes
protagonistas que están financiando este “gran circo”.
Evidentemente, el
plan no es flor de un día y se ha estado gestando durante mucho tiempo. En las
últimas décadas, el Nuevo Orden Mundial ha reclutado, educado, financiado y
preparado a innumerables personas que después ha colocado en puestos claves de
poder (léase Úrsula von de Leyen, Biden, Macron, Sánchez, Tedors….). No hay un
solo partido político, institución importante, gran corporación o gobierno que
no tenga infiltrados del MOM.
¿Y qué decir del
esperpéntico espectáculo ofrecido las pasadas navidades? Porque, vamos a ver.
Si el propio Ministerio de Sanidad Español hace constar en su página web que
los test de antígenos no son válidos por sí solos para diagnosticar el
Covid-19, entonces, ¿a qué viene arengar a las masas a utilizarlos? Pues,
evidentemente, para que toda esa caterva de descerebrados mononeuronales hayan
creado ellos solitos la 6ª ola, dando lugar al auto-diagnóstico y al
auto-confinamiento.
¿Todavía no te
has percatado de que todo se reduce a “vacunar”, “vacunar” y volver a “vacunar”
a toda la población mundial?
Ante esta
evidencia, cabe preguntarse: ¿qué contienen realmente las vacunas que son tan
necesarias para nuestros gobiernos? Porque no olvides que es tu Gobierno el que
te está “vacunando”, ya que la "vacuna" no te la está recetando
ningún médico y se está inoculando a la población sin el obligado (por ley)
consentimiento informado, saltándose tratados internacionales como el Convenio
de Oviedo o el Código de Núremberg.
Un descubrimiento asombroso.
Según reza en su
página web, La Quinta Columna.net/ es un movimiento de libre pensamiento y una
web de reflexión y pensamiento crítico. Pues bien. Desde el principio de esta
crisis llevan investigando sobre este asunto y han llegado a la siguiente
conclusión: los viales de las supuestas “vacunas” llevan óxido de grafeno y
algo más.
En un sorprendente
vídeo, publicado el 31 de
diciembre de 2021 (duración 8
minutos), se muestran imágenes de lo que podría ser un “micro-router” o “nano-chip”
encontrado en un vial de la “vacuna de
Pfizer que, evidentemente, no tendría que estar ahí. Según el autor del vídeo,
Ricardo Delgado, esto es lo que están inoculando a todo el planeta. Si esto es
así, ¿no deberíamos preguntarnos con qué intención?
Así, a bote
pronto, se me ocurre que estas mal llamadas “vacunas” tendrían la capacidad de
transformarnos en transmisores-receptores andantes. Podríamos ser controlados y
manipulados mediante radiofrecuencias emitidas por la tecnología 5G. Por lo
tanto, podrían desencadenar, por
ejemplo, enfermedades a su antojo o someternos a su voluntad. ¿Crees que es demasiado
conspiranoico?
Y ahora unas
impactantes declaraciones del Dr. Young.
“La teoría del virus no solo es seriamente
defectuosa, sino que es falsa, pero los tecnócratas con sus supercomputadoras
de Inteligencia Artificial y su nanotecnología, 4G, 5G, 6G han llegado a crear
el arma biológica silenciosa inteligente perfecta disfrazada de virus asesino.
Los test invasivos y las llamadas “vacunas” forman la columna vertebral de esta
arma biológica silenciosa para proporcionar óxido de grafeno reducido
citotóxico, genotóxico y magnético tóxico que conectará a los seres humanos y
los animales al Internet de las Cosas (IOT) para la esterilización, el control mental,
el rastreo de contactos y la eventual matanza de seres humanos que reducirá el
exceso de población de los "estómagos inútiles", que decía Henry
Kissenger”.
Recapitulando.
Que la mayoría de
nosotros no tengamos conocimientos de microbiología, nanoingeniería, nanotecnología
o nanorobótica, no quiere decir que esas ramas de la ciencia no existan y que
actualmente estén muy desarrolladas. Por lo tanto, no caigamos en disonancias
cognitivas que anulen nuestra capacidad de razonar.
Con esto no estoy
diciendo que creas todo lo que lees y ves aquí. Simplemente échale un vistazo,
investiga y saca tus propias conclusiones. Nada más.
Por cierto. ¿Alguien se ha preguntado por qué en 2020 (momento álgido de la “pandemia”) murieron en el mundo 1.800.000 personas (sin “vacuna”) y en 2021 murieron 5.000.000 después de implementadas las “vacunas”?
Estos artículos son los IMPRESCINDIBLES ...que diría B.Brech.
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